Al momento de ponernos frente al volante para conducir nuestro automóvil todos nuestros sentidos necesitan estar alertas. La conducción requiere de los sentidos para tener una conducción segura. Escuchar lo que pasa en nuestro entorno o poder oler en caso de emergencia si el vehículo aumenta su temperatura, son acciones esenciales para reducir nuestro riesgo de accidentes.