La carencia de una adecuada educación vial es, junto con el insuficiente mantenimiento de las carreteras y la falta de sanciones ejemplares, la causa del elevado número de muertes en accidentes de tránsito en Chile, segundo país de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) en víctimas mortales por accidentes de tránsito.
Así lo manifestaron diversos expertos y autoridades la cuales dieron la voz de alarma ante el hecho de que nuestro país registre una tasa de 12 muertes al año por cada 100.000 habitantes.
Esta alarmante cifra figura en un reciente estudio elaborado por la OCDE dado a conocer en la última Cumbre Anual del International Transport Forum (ITF), celebrada en mayo pasado.
El debate sobre la seguridad vial se ha reavivado después de que este martes la estrella del fútbol chileno Arturo Vidal protagonizara, en pleno desarrollo de la Copa América, un accidente de tráfico por conducir en estado de ebriedad.
Tras el incidente, un juez dejó en libertad al jugador, con la obligación de firma mensual y la retención de su licencia de conducir mientras dure la investigación, tal como se indica en la legislación, cuyas penas son catalogadas como "mínimas" en materia de accidentes viales.
El número de fallecidos en Chile en accidentes de tránsito en 2014 fue de 1.630 personas, según datos de la Comisión Nacional de Seguridad de Tránsito (Conaset).
Esto se debe a la baja fiscalización de las rutas, donde sólo el 7 % de los infractores es controlado; al consumo de alcohol y a los excesos de velocidad. De hecho, el 40 % de las muertes por accidentes viales son por estas causas.
Según la Conaset, en 2014 se produjeron 78.445 siniestros de tránsito. De ese total, cerca de 40.000 fueron a causa de la imprudencia del conductor y más de 5.000 por conducir bajo los efectos del alcohol.
En los últimos años, en Chile se han aprobado dos normas para endurecer las sanciones en este ámbito, una es la "ley Emilia", que castiga con penas de cárcel a quienes conduzcan bajo la influencia del alcohol y provoquen accidentes, y la otra es la "ley de tolerancia cero", que redujo las dosis de alcohol permitidas para manejar.
Cada año mueren 130.000 personas en accidentes de tráfico en Latinoamérica y el Caribe, una cifra siete veces superior a la de Europa y que podría alcanzar, si no se toman más medidas, los 450.000 fallecidos en 2025, según estimaciones del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).